Breve estudio de la flor de la vida

La flor de la vida es un dibujo geométrico que contiene 19 círculos, todos de igual radio, los cuales se encuentran superpuestos. Nótese que el diámetro de cada círculo cruza exactamente por los centros de otros seis círculos más, exceptuando los círculos de las orillas. Dicho entramado geométrico culmina en una forma hexagonal muy interesante.

Atribuciones

Este dibujo tiene atribuciones de todo tipo, en su mayoría relacionados al misticismo y esoterismo. Desde este supuesto cambio correspondiente a la precesión de los equinoccios, es decir, la transición de la era de piscis a la de acuario conocido como la “nueva era” hubo una explosión de información relacionada a “cambios de conciencia” el cual ha tenido mucha aceptación por las nuevas generaciones; y es por este movimiento que la flor de la vida se ha dado a conocer a través del mundo con una gran rapidez. Es, además, símbolo por excelencia de la geometría sagrada.

Acá hay un documental corto que explica este singular diseño geométrico, desde un punto de vista esotérico. Es el capítulo número cuatro de una serie de 10 documentales llamada “la escuela de misterios del ojo de Horus” que se transmitió por un tiempo en el canal infinito hace un par de años.

Una excepcional pieza de arte

Luego de un breve estudio preliminar del dibujo, evaluemos ahora qué es lo que lo hace único, hermoso y tan llamativo.

Fuera de todo atributo místico o espiritual, el atractivo de este dibujo tiene otros motivos, geométricos y artísticos quizá ocultos muy interesantes que abordaremos a continuación.

• El dibujo en sí mismo es un producto de diversas “vescica pisces” (vejigas de pez) entrelazadas.

El vescica pisces es otro dibujo geométrico aparentemente sencillo  que tiene propiedades matemáticas interesantes. En él se inscriben dos triángulos equiláteros, ademas se encuentra la raiz de tres, de dos y de uno

• En ella se puede encontrar el árbol de la vida: talvez hayas escuchado hablar sobre este símbolo cabalístico

• Dentro de ella se pueden dibujar los sólidos platónicos: es decir, el tetraedro,el hexaedro o cubo, el octaedro, el dodecaedro y el icosaedro.

• Es un dibujo sin principio ni fin: ¿a qué me refiero con que “no tiene principio ni fin”? es lógico que principio tiene, pues de ser así no podría dibujarse. Mas yo me refiero a que una vez hecho el dibujo, cualquier círculo puede ser el “principio” ya que sin importar a qué parte del dibujo se fije la vista todo está igual. Carece de fin porque en sí la figura continúa indefinidamente. Me atrevería a decir, incluso, que la flor de la vida entra en la categoría de fractal matemático, por diversas razones que no discutiremos en esta entrada.

Luego de leer esta entrada talvez te animes a investigar más sobre esta singular pieza artística. Te exhorto a que intentes dibujarla para que te pierdas un poco en su complejidad y te diviertas.